Siempre me han gustado las especias. Y sobre todas ellas, el "curry" es la que se lleva la palma. No por que sea la que más utilizo, que pudiera ser la pimienta. Si no por que el curry lo invade todo cuando cocinas.
Curry... literalmente, es la palabra que denomina a los platos que se elaboran con esa mezcla de especias.
En todo el mundo existen distintas clases de curry, formados por distintos condimentos y especias.
Los ingredientes principales son: cilantro, pimienta de cayena, nuez moscada, cúrcuma, comino, jengibre, mostaza, apio, azafrán, etc. Según la zona.
De esta manera, os propongo disfrutar de los sabores de fuera, con productos de aquí.
De esta manera, os propongo disfrutar de los sabores de fuera, con productos de aquí.
Ingredientes para 4 personas:
4 filetes de pollo de contramuslo
200 g de champiñones
250 g de cuscús
250 ml de caldo de pollo
2 pimientos verdes
1 cebolla
Curry, pimienta negra
Sal y aceite de oliva
Troceamos el pollo. Utilizaremos la parte del contramuslo porque es más jugosa que la pechuga.
Adobaremos el pollo con el curry, la pimienta negra y un buen chorro de aceite de oliva. Dejándolo reposar un buen rato.
Mientras tanto, trocearemos también los champiñones, el pimiento y la cebolla, en trozos lo suficientemente grandes para que al pincharlos con los palillos de madera, no se nos partan.
Formaremos las brochetas de manera que no se junten dos mismos ingredientes. Así se mezclaran mejor los sabores.
Pondremos las brochetas en la plancha. Primero a fuego lento y más tarde un poco más fuerte. Conseguiremos de esta manera, que no se nos quemen las verduras.
Para el cuscús. En una cazuela pondremos el caldo de pollo y lo calentaremos hasta que empiece a hervir. Retiramos del fuego y añadimos el cuscús sin parar de remover durante unos 3 minutos. Si queremos que esté un poco más suelto, añadiremos un chorro de aceite de oliva o un poco de mantequilla.
Al servir, podemos añadir al cuscús, algunas verduras a la plancha que nos hayan sobrado de las brochetas.