No es la primera vez, que os he hablado, de lo mucho que me gusta incorporar, a mis platos, un toque de licor. No solamente los vinos olorosos, sino cualquiera de las bebidas espirituosas, además de ablandar la carne, dan un toque diferente y muy agradable.
Hoy voy a preparar, un sencillo plato con solomillo de cerdo. Podéis encontrarlo muy fácilmente en cualquier supermercado a buen precio y bien preparado.
Ingredientes para 4 personas:
2 Solomillos de cerdo (650 g cada uno aprox.)
1 tomate
1 pimiento verde
1 zanahoria
1 puerro
Ajo
1/2 vaso de brandy
Pimienta negra molida
Azúcar
Sal y aceite de oliva
Como primer paso, vamos a calentar el aceite en una olla exprés o en una cazuela. Salpimentamos las piezas de solomillo. Antes se marcar un poco los solomillos, vamos a cubrir la carne, con un poco de azúcar para que tome un color dorado. Pasamos por todos los lados la carne. Retiramos y reservamos.
Ahora sofreiremos un poco toda la verdura cortada fina y unos dientes de ajo en láminas. Siempre en la misma cazuela donde vamos a hervir los solomillos. Ponemos otro poco de sal.
Añadimos el 1/2 vaso de brandy a la verdura e introducimos la carne. Cubrimos de agua y cerramos la olla exprés. Cocemos a fuego medio unos 30 minutos.
Terminada la cocción, retiramos las piezas de carne para dejar que enfríen y pasamos tanto la verdura como el caldo por un pasapurés o con la batidora. Si tenemos mucho caldo, retiramos un poco, luego podemos añadirlo si lo necesitamos.
Cuando tengamos algo templados los solomillos, los cortamos en finas capas. Siempre será mucho más agradable.
Presentamos y acompañamos con esa deliciosa salsa. Adornamos con un poco de puerro dorado.
Un sencillo plato con un delicioso toque...espirituoso.