Aunque no es época de espárragos, los tenemos habitualmente, no son muy caros y son una opción muy interesante para cualquier momento.
En esta ocasión los haremos de una manera muy original, rápida y que seguro dará que hablar. Podemos prepararlos de un día para otro, eso nos facilitará la tarea.
Ingredientes para 4 personas:
2 manojos de espárragos trigueros
250 g de jamón de york en lonchas
2 huevos
Pan rallado
Vinagre de frambuesa
Sal y aceite de oliva
Cortamos los tallos más duros de los espárragos. En una cazuela con agua y sal, los cocemos a fuego lento, unos 15 minutos.
No deben de cocerse del todo, tienen que estar al dente, luego habrá que freírlos. El tiempo de cocción puede variar según el tamaño de los espárragos.
Los reservamos, dejándolos enfriar.
Preparamos los huevos batidos y un plato con el pan rallado.
Cuando los espárragos estén fríos, los envolvemos con el jamón de york. Podemos optar por envolverlos con media loncha o entera.
A mi parecer, la loncha entera sería para dos espárragos. En este caso, vamos a optar por media loncha. Creo que es suficiente.
Pasamos los espárragos y sus abrigos, primero por el huevo batido y luego por el pan rallado.
Colocamos todos en un tuper o en una bandeja con tapa. Congelamos.
Cuando estemos listos, para prepararlos. Pondremos una sartén con el fuego muy caliente, así evitaremos que al freir, el rebozado se desprenda.
Retiramos del fuego cuando estén dorados, colocándoles en papel de cocina para que escurran el aceite sobrante.
Los pasamos a la fuente de servir, decoramos con una reducción de vinagre de frambuesa, que podréis encontrar en los supermercados. También viene bien una reducción de mermelada de fresas. Aunque es un poco más dulce.
Servimos al instante.