Este verano, ni los postres apetecen calientes, así que hoy os propongo una receta, un poco elaborada, pero seguro que os agradará muchísimo, y con este postre, participo aunque un poco tarde, en el Reto de Agosto de Cocineros en el Mundo de Google+ en el apartado de Dulce (ciruelas).
Ingredientes:
250 ml de leche
200 ml de nata para cocinar 18 % MG
125 g de queso crema
150g de azúca
10 g de azúcar avainillado
5 g de gelatina neutra
75 g de mantequilla o margarina
100 g de galleta molida
Para la mermelada:
75 g de azúcar
250 g de ciruelas amarillas (golden) limpias
Vamos por partes.
Primero mezclamos en un pequeño bol, las galletas que hemos triturado hasta conseguir un polvo grueso y la mantequilla o margarina disuelta. Removemos, hasta conseguir una pasta consistente.
Cubrimos con la pasta de galleta, el fondo de las copas o vasos que utilizaremos. Dejamos enfriar.
Ahora preparamos el dulce de queso.
En una cacerola pequeña, ponemos la nata, la leche y el queso crema, junto con el azúcar y el azúcar avainillado. Disolvemos y calentamos a fuego medio hasta que comience a hervir. Bajamos un poco el fuego sin parar de remover. Añadimos la gelatina neutra. Proseguimos hasta comprobar, que empieza a espesar. Retiramos del fuego y rellenamos las copas, conservando algo de espacio para rematar con la mermelada de ciruela. Enfriamos.
Para terminar, una sencilla mermelada de ciruelas.
Teniendo limpias de piel y el pipo, las ciruelas. En otra cazuela, calentamos las ciruelas con el azúcar y un chorrito de agua. Removemos sin parar...en un momentito tendremos una mermelada con todo su sabor.
Si en las copas, el dulce de queso es lo suficientemente consistente, añadimos las mermelada templada.
Dejamos enfriar otro poco más nuestros...deliciosos.
Presentamos fríos.
Disfrutaremos así, de una delicia con las ciruelas de la temporada.