viernes, 5 de abril de 2013

Un huerto en casa. En pequeño

Hace unos días, os explicaba la manera, de tener un pequeño huerto en casa, sea en una terraza o en un patio. La verdad, es que era un ejemplo un poco grande, pero de sobra, para que entendierais los quería deciros.
Hoy os traigo un ejemplo un poco más pequeño, pero igualmente posible. En esta ocasión vamos a plantar, en unas pequeñas jardineras, pero lo suficientemente profundas para sembrar, unas fresas.


Aquí tenemos las jardineras de unos 40 cm de largo por 20 cm de profundidad, suficiente para lo que queremos. Si no tenéis una jardinera, en un tiesto normalito, siempre que tenga algo de profundidad, como unos 15 cm, puede valer.


Lo que vamos a necesitar, es un poco de piedra para el fondo, para que el agua drene y no encharque las raíces. Ya lo vimos en la entrada del maceto-huerto. En este caso, vamos a utilizar un poco de marmolina, que encontraremos en cualquier establecimiento de jardinería. Normalmente, es para decoración, pero lo tenía en casa y es perfecto. Utilizarmos también sustrato vegetal, y un poco de mantillo para dar un poco de fuerza al sustrato. 


Necesitaremos una pequeña paleta, la clásica regadera, las semillas y unos pequeños cartelitos con el nombre de lo que vamos a plantar. Más adelante lo veremos mejor.


¡Empecemos! 
Colocamos en el fondo, una capa de piedras para que el agua no se retenga, drene mejor el tiesto y las raíces no se pudran en contacto de una posible agua retenida. también para tapar un poco los agujeros de la jardinera, si son muy grandes.


Rellenamos con el sustrato mezclado con un poco de mantillo. Podemos utilizar cualquier abono natural. En una próxima entrada, hablaremos de esto. Sembramos intentando dispersar todas las semillas por la jardinera. 


Cubrimos las semillas, con otra pequeña capa de sustrato. Como podéis ver en la foto, no he rellenado por completo la jardinera, de esta manera, al regar, no tendremos problema, que se salga el agua o el sustrato. Además, después de repetidos riegos, el sustrato se asienta y podríamos necesitar poner un poco más.


Regamos con la regadera de forma suave, sin muchas salpicaduras, para no levantar las semillas plantadas.


Con los palitos de los pinchos morunos y papel, creamos unos carteles para recordar, que es lo que hemos plantado. Aunque no se aprecia bien en la foto, podemos escribir también, la fecha del sembrado para saber, si todo va bien y no tenemos problemas con las semillas. Recubrimos con adhesivo para impedir que la humedad, pueda estropearlos.


Como podéis ver, no es tan complicado tener un pequeño huerto en casa. Ahora sólo hace falta ponerlos en un lugar soleado o bien iluminado y un riego controlado.
En esta ocasión, he plantado unas ricas fresas, eneldo, cilantro, salvia y un tiesto con cebollinos. En próximas entradas, os iré enseñando los resultados.

Espero que os animéis y plantéis muchas cosas para darle un toque más fresco y agradable a vuestra cocina.