viernes, 1 de febrero de 2013

Chuleta de cerdo con membrillo

Por fin he terminado de hacer todo el membrillo que tenía. Aunque en casa solo tengo un árbol, que por cierto, da muchos frutos, siempre consigo alguno más. Este año, después de estar mucho en la cocina, he conseguido dos texturas, se puede decir que tengo dulce y carne de membrillo, es lo mismo, pero no lo parecen. Otro día os cuento como lo hago.
Todo esto viene, por la receta que hoy vamos a realizar. Como siempre, es una receta sencilla  y como es habitual en mi, vamos a mezclar, lo dulce y lo salado. Además, utilizaremos chuletas de cerdo, que aunque en casa, no es muy habitual, es agradable y sobre todo es una carne muy atractiva para esta combinación de sabores.
Comencemos.


























Ingredientes:

Chuleta de cerdo
Cebolla
Dulce de membrillo
Caldo de carne
Maicena
Pimienta negra molida
Sal y aceite de oliva

Va a ser tan sencillo como...

En una sartén con aceite caliente, sofreímos la cebolla cortada en juliana, la freímos despacio, sin prisa. Al momento de poner la cebolla, incluimos una o dos cucharadas de dulce de membrillo para que se deshaga también despacito. Cuando esté la cebolla casi hecha, mezclamos con una cucharada de maicena para que espese. Removemos para que pierda el sabor, y rápidamente  añadimos el caldo de carne. Disolvemos con la cuchara de madera, los posibles grumos de la maicena. Dejamos a fuego lento, hasta que la salsa espese.

Mientras todo esto ocurre, podemos ir adelantando, salpimentando la chuleta de cerdo. En otra sartén con un poco de aceite caliente pasamos la chuleta. Sabéis de antemano, que el cerdo hay que hacerlo bien, que no se quede crudo. Este plato será suficientemente jugoso, no os preocupéis.

Cuando tengamos todo listo, emplatamos y salseamos la chuleta.

Atención: Podemos dejar reposar unos minutos la chuleta, a fuego muy lento, después de hacerla, en la cazuela o sartén donde hemos hecho la salsa. 

¡Seguro que estará divina!.