Existen platos, que son el remedio, para cualquier situación. De los que siempre se echa mano cuando lo necesitas.
No paras de pensar, que puedes hacer en especial. Tienes invitados, y no sabes que poner, hay que preparar comida para una fiesta, un día especial, un cumpleaños...
En esta ocasión, vamos a preparar uno de esos platos "solución".
Ingredientes:
Pan de molde sin corteza
Salmón ahumado
Queso crema
Lechuga
Tomates
Palitos de cangrejo
Huevos duros
Mayonesa
Pepinillos pequeños
En un bol, cortamos en trozos pequeños, la lechuga, el tomate, los palitos de cangrejo, y el huevo sin la yema, la reservamos para adornar.
A mi, me gusta alternar trozos pequeños y otros un poco más grandes. De este modo no se nos formará una pasta, nada agradable.
Añadimos la mayonesa y removemos para que se mezcle bien.
Reservamos.
Preparamos la bandeja donde vamos a poner el pastel.
Comenzamos a untar las rebanadas de pan de molde con queso crema por una cara. Las situaremos una al lado de la otra, para que no caiga nada entre ellas.
Atención: Las rebanadas no deben de ir con mucha cantidad, hay que tener en cuenta que todas las rebanadas llevarán queso. Puede ser un poco empalagoso.
Con una cuchara grande, ponemos el relleno encima de las rebanadas, procurando que no se caiga nada.
De esta forma, vamos incorporando rebanadas y relleno, formando los pisos que deseemos. Montar dos pisos, es la forma más habitual. Incluir otro, podría causar "derrumbe".
Cubrimos la azotea, con lonchas de salmón ahumado. Rematando con la yema del huevo rallada, que reservamos antes. Podemos decorar también, con unos pepinillos picados, caviar o cualquier otra cosa.
Atención, de nuevo: Podéis incorporar, a la receta, cualquier ingrediente que os guste, o simplemente eliminar alguno de estos.
Seguro que quedará, igual de bien.